Los cosméticos y tratamientos de belleza deben ser modificados continuamente en función de la edad. En esta ocasión, te presentamos la mejor rutina de cuidado de la piel a los 40 años.
Escoger los productos más adecuados para nuestro tipo de cutis y edad no resulta nada sencillo. En el mercado de la cosmética encontrarás miles de tratamientos que prometen resultados impresionantes, sin embargo, no todos son totalmente efectivos.
Para mantener un aspecto joven y saludable por más tiempo es imprescindible que lleves a cabo una serie de cuidados y que no prescindas del uso de ciertos cosméticos.
A continuación, te mostramos paso a paso cómo debes tratar tu piel si has llegado a esta edad. ¡No olvides tomar nota!
Qué le ocurre a tu piel a partir de los 40
¿Sabes qué es lo que le ocurre a tu cutis cuando llegas a los 40? A esta edad se produce un descenso de los niveles de colágeno. Esta proteína se encarga, entre otras funciones, de dar firmeza y elasticidad, por lo que es muy probable que aparezcan las primeras arrugas y líneas de expresión.
Los signos más evidentes son los siguientes:
Falta de hidratación
La hidratación cutánea es imprescindible para mantener una buena salud. Si tu cutis está hidratado, tendrá un mejor aspecto y se producirá un menor número de arrugas.
Por el contrario, cuando el rostro está deshidratado se nota tirantez y se aprecian algunas zonas resecas.
Aparición de arrugas y acentuación de líneas de expresión
El mayor temor de las mujeres que entran a este rango de edad es la aparición de arrugas, así como otros signos de la edad.
Como hemos mencionado anteriormente, la falta de colágeno y elastina provoca esta desagradable situación.
Las arrugas más frecuentes son: las del entrecejo, en la parte superior de la frente, cuello y en el contorno de ojos.
Pero, ¡tranquila! Hay remedio para todo.
Pérdida de luminosidad
Sin duda, el paso del tiempo produce una pérdida de luminosidad. El motivo principal se debe a que se produce un cambio en la microcirculación superficial cutánea.
Manchas pigmentarias
¿Sabías que la piel es un órgano con memoria? Con esto nos referimos a que recuerda las exposiciones al sol que has hecho a lo largo de tu vida, y puede que ahora te pase factura produciéndose algunas manchas nuevas.
Te recomendamos que evites siempre la aparición de estas manchas, ya que eliminarlas completamente resulta casi imposible.
¿Cuáles son los principales objetivos?
Los objetivos principales que se desean conseguir a esta edad son los siguientes:
- Prevenir la aparición de nuevas manchas.
- Conservar la firmeza y elasticidad.
- Aportar luminosidad.
- Evitar aparición de arrugas.
- Disminuir la visibilidad de pequeñas líneas de expresión y evitar que se acentúen en mayor grado.
Rutina de cuidado diaria
A continuación, te mostramos la rutina de cuidado que debes llevar a cabo cada día.
Limpieza
¿Sabías que un buen cuidado del rostro comienza con una limpieza? Es muy importante que cada noche elimines completamente el maquillaje antes de irte a dormir. Por muy cansada que llegues a casa, ¡no hay excusas!
De lo contrario, la piel no se oxigena y los poros quedan obstruidos, por lo que a largo plazo se generan arrugas y otros efectos negativos.
Por las mañanas también debes eliminar las impurezas que se han creado mientras dormías.
Para llevar una limpieza facial recomendamos utilizar un agua micelar. Se trata de una loción limpiadora muy fresca y ligera. Además, suelen ser respetuosas con la piel.
Pon un poco de líquido sobre un disco de algodón limpio y retira la suciedad de ojos, labios y rostro.
Si quieres un mejor resultado, enjuágate con agua y sécate con una toalla limpia con pequeños toques, sin ejercer presión.
Tónico facial
El uso de un tónico facial también es recomendable para aportar un mayor frescor y calmar la dermis. Ponlo antes de tu serum habitual.
Si no quieres gastar demasiado dinero en productos de belleza, puedes utilizar el agua micelar como tónico. Tan solo tienes que verter una pequeña cantidad en un disco de algodón y pasarlo por la cara, cuello y escote con pequeños toques.
Otra opción es elaborar tu propia versión casera. Por ejemplo, mezcla en una botella limpia una cucharada de vinagre de manzana y 125 ml de agua natural. Ponlo unas horas en el refrigerador y ¡listo! Ya tienes un tónico facial natural.
Aquí tienes las mejores opciones.
Sérum
¿Sabes qué es el sérum? Se trata de un fluido muy ligero de absorción rápida cuya principal función es potenciar los efectos de otros tratamientos.
Existen diferentes tipos de sérums adaptados según los objetivos que deseemos: hidratar, revitalizar, iluminar, matificar, combatir el acné, etc. Aquí tienes una selección de las mejores opciones.
Debes ponerlo siempre antes de la crema hidratante. Espera a que se seque para proceder con el resto de productos de tu rutina.
Contorno de ojos y labios
Uno de los mayores errores que cometemos es no cuidar de forma específica zonas extremadamente sensibles como el contorno de ojos y de labios.
No utilices nunca tu hidratante en estas zonas. Ten en cuenta que en la parte de los ojos pueden producirse bolsas, flacidez e hinchazón.
Aconsejamos el uso de cremas exclusivas para ambas partes. Un truco es aplicar aceite de almendras, de coco o de argán.
Hidratación
Seguro que eres consciente de que la hidratación es otro hábito fundamental, ¿verdad?
Gracias a ella proporcionamos al rostro sustancias beneficiosas como lípidos, vitaminas, antioxidantes, péptidos, etc.
A partir de esta edad lo ideal es escoger una crema hidratante con colágeno y ácido hialurónico, de este modo, aportará una mayor elasticidad y prolongará el efecto de hidratación por más tiempo.
Asegúrate de que la loción que seleccionas es indicada para tu edad y tipo de cutis. Presta mucha atención a este aspecto, puesto que no es recomendable el uso de una crema con textura extremadamente densa en personas que tienen una piel grasa o mixta.
Descubre las mejores cremas antiarrugas para mujeres de 40 años.
Protección solar
En verano todos deseamos obtener un maravilloso tono bronceado, pero ¡cuidado! El sol es una de las principales causas del envejecimiento prematuro. ¿Sabes qué otros efectos puede provocar?
- Aparición de manchas pigmentarias.
- Deshidratación.
- Quemaduras y rojeces.
- Picor.
- Y en el peor de los casos, cáncer de piel.
Utiliza un gel protector cada día antes de salir de casa tanto en invierno como en verano. No te dejes engañar por los días nublados, ya que las nubes no nos protegen de los rayos UV.
Te recomendamos que escojas una crema con filtros físicos. Son aquellas elaboradas a partir de minerales como óxido de titanio, el óxido zinc, mica, talco o el óxido de hierro.
El principal inconveniente que ofrece este tipo de lociones es que aporta un aspecto blanquecino, pero son más respetuosas con la dermis y con el medio ambiente, por lo que, sin duda, merecen la pena.
Mascarillas faciales
Utilízalas al menos una vez a la semana. Antes de comprar una mascarilla, asegúrate que está indicada para tu tipo de cutis.
Limpia bien la cara con abundante agua y sécala levemente. A continuación, unta la mascarilla facial y deja que repose unos 20 minutos. Seguro que después notarás un gran alivio en tu rostro.
Evita las que son del tipo peel off, ya que resultan muy agresivas. Aquí te muestro las mejores opciones del mercado.
Exfoliación
Mediante la exfoliación se eliminan las células muertas que impiden la oxigenación y la regeneración, por lo que retrasa el envejecimiento prematuro.
Si te quedas sin exfoliante, puedes mezclar un poco de azúcar moreno con aceite de almendras. Realiza un suave masaje facial y enjuágate con agua.
¿Son eficaces los tratamientos?
Todos los tratamientos y productos que te hemos recomendado son totalmente eficaces. Eso sí, tendrás que ser muy constante y llevar a cabo esta rutina cada día para percibir los resultados.
Ten en cuenta que los cosméticos no son fórmulas mágicas que hacen cambiar nuestro aspecto de un día para otro. Existe una serie de factores que también repercuten en el estado de la piel (genética, contaminación, estilo de vida…). Aun así, estos productos logran solucionar una gran cantidad de problemas.
Conclusión
Esta ha sido nuestra propuesta como la mejor rutina de cuidado de la piel a los 40 años.
A modo de resumen, los principales pasos que debes dar son: limpieza, hidratación, protección, exfoliación y tonificación.
Existen también otros productos específicos como el sérum y los contornos que otorgan grandes resultados.
Esperamos que estos consejos te sirvan de ayuda para lucir un aspecto más joven y saludable por más tiempo.